Hoy en Colombia muchas empresas se detuvieron a digerir la circular 064 sin saber qué hacer con el riesgo psicosocial en sus empresas y con gran incertidumbre de cómo hacer intervenciones, lo paradójico de esta situación en que no es un tema nuevo, hablar de intervención del riesgo psicosocial.

A mediados del 2008 con la resolución 2646 ya se hablaba de intervención de riesgo, ocurrió un fenómeno desbordado y particular de medir riesgo psicosocial y conformarse con un informe bonito lleno de datos y resultados y que solo a partir de allí se hacía intervención, llevando a muchos profesionales a reducirse en exploración de otras variables particulares de la empresa.

La dinámica nos cambió hoy por hoy, nos invitó a ser más curiosos y a navegar en nuevas formas, no solo de intervenir el riesgo psicosocial, sino que también nos está llevando a hacer análisis más profundos del contexto, a identificar efectos de estrés en las personas sin necesidad de medir con la batería, en definitivamente nos sacó de la zona de confort.

El gran reto de los profesionales de la psicología es ir más allá de propuestas de intervención con capacitaciones e intervenciones en crisis, está en poder sensibilizar estratégicamente en los directos implicados de la toma de decisiones, es decir, en la fuente de los factores de riesgo, esto implica varios aspectos de conocimiento actual en temas que afectan a la empresa  como lo son:

• Estados financieros
• Curva de crecimiento o decrecimiento
• Estabilidad laboral
• Recursos para el colaborador
• Consecución del negocio
• Estado actual del posicionamiento en el mercado

Lo que significa que no serán las mismas intervenciones de siempre, en muchas ocasiones el riesgo va a estar presente debido a la naturaleza de los cargos y hasta del negocio, en estos casos lo que se debe hacer es aumentar los factores protectores sin que estos representen un desequilibrio en la gimnasia financiera en la que muchas empresas se encuentran actualmente.

El enfoque de muchos colegas está dado en la salud mental y sus efectos, considerando como protagonista este tipo de intervención lo cual es totalmente válido por el momento que atraviesa el mundo con relación al impacto que hemos tenido en todas las esferas de la vida, no obstante, existen otras variables a contemplar en la dinámica del trabajo con relación al riesgo psicosocial y es la demanda del trabajo y las condiciones de trabajo incluso metodología y recursos que se están dando en las organizaciones.

Resulta fácil atiborrar de información a personas con relación a técnicas de cómo manejar el estrés, afrontar las situaciones, etc., pero si nos vamos a un plano más objetivo de métodos y tiempos específicos de demandas de trabajo el panorama cambia y nos obliga a comprender la interacción del trabajo como algo más complejo.

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¿Qué medidas debo tomar?

Es posible que se estén generando acciones de intervención en las personas de forma equivocada teniendo expectativas de adaptación del individuo en condiciones completamente diferentes a las habituales antes de pandemia, la invitación es que pensemos en estrategias integrales acordes a la realidad de los procesos y el cambio que ha generado el hacer de la actividad y la condiciones que la rodean como, por ejemplo:

• Las horas de exposición al riesgo
• El número de actividades requeridas en tiempos específicos, con novedades de recorte de personal
• Análisis de métodos y tiempos de trabajo
• Objetivos de procesos y sus indicadores
• La austeridad aplicada a los recursos y presupuestos
• Impacto económico en la empresa

Todas estas variables deben ser vistas a la luz de la intervención y co-creando con la empresa las nuevas tendencias y planes de acción a la medida, siendo coherente con el negocio, sus estrategias y objetivos.

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