¿Qué es y por qué se produce?
El estrés es resultado de la interacción entre el individuo y el ambiente. Una respuesta de adaptación condicionada por las diferencias individuales o los procesos psicológicos de cada persona, que como consecuencia de las presiones que el ambiente laboral ejerce sobre ellas, desarrollan varios síntomas que pueden influir de manera negativa en su desempeño.
¿De qué está hecho el Estrés Laboral?
El estrés consta de tres elementos fundamentalmente:
1. Desafío percibido: Surge de la interacción con las personas y la manera en que perciben el ambiente.
2. Valor importante: El desafío solo causa estrés, cuando amenaza un valor que es importante para la persona.
3. Incertidumbre de la resolución: Cada quien interpreta la situación en términos de la facilidad con que podrá resolver eficazmente el desafío que se presenta.
Reacción ante el Estrés Laboral
La reacción del organismo ante el estrés ocurre en tres fases:
1. Alarma: Se presenta cuando la persona identifica o percibe una amenaza ya sea física (amenaza de daño corporal) o psicológica (amenaza de perder algo como el empleo)
2. Resistencia: La persona se vuelve flexible a las presiones creadas por la amenaza inicial. Los síntomas fisiológicos derivados de la fase de alarma desaparecen, aunque permanezca la causa del estrés.
3. Cuando la exposición a causa del estrés perdura mucho, la persona entra en la fase de agotamiento, reaparecen muchos de los síntomas de la fase de alarma. Si el estrés perdura la persona empieza a sufrir cansancio, un estado de agotamiento que puede causar un daño físico grave, incluso la muerte.
Cómo reducir la insatisfacción y el Estrés Laboral
• Enriquecimiento del trabajo: La naturaleza de la tarea ejerce gran influencia en la insatisfacción y el estrés de las personas.
Una manera para contrarrestar la monotonía de trabajos simples y repetitivos y de aumentar gradualmente su variedad y sus desafíos, es incrementar la complejidad y el significado que la tarea tiene para la persona.
• Rotación de puestos: La posibilidad de ocupar distintos puestos, de complejidad equivalente es una manera de huir de la rutina y el estancamiento, ya que se incluye variedad en las actividades y en las habilidades personales, además de facilitar la adquisición de conocimientos nuevos.
• Oportunidad para hablar del trabajo: La oportunidad formal para presentar quejas y expresar opiniones es un medio de comunicación que garantiza la posibilidad de deshacerse en forma activa y constructiva de las frustraciones del trabajo. Se ha demostrado que los procedimientos de queja, las investigaciones de actitudes y las sesiones de preguntas y respuestas entre los trabajadores y la administración mejoran las actitudes de las personas y disminuye la rotación.
• Participación en la toma de decisiones: La participación en las decisiones que afectan el trabajo, ya sea en forma de encuentros ocasionales o periódicos o en reuniones formales con los superiores, permite reducir el conflicto, el estrés emocional y el ausentismo.
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