Felicidad es la experiencia de alegría, satisfacción o bienestar positivo, combinada con la sensación de que nuestra vida es buena, tiene sentido y vale la pena.

(Sonja Lyubomirsky, 2009)

Por: Viviana Rojo

Hoy en día es común encontrar que se hable de felicidad en la empresa y se trabaje continuamente en ello desde diferentes actividades o incluso desde la estructura como tal, de la organización, nominando áreas para que se encarguen de la misma, pero ¿tenemos claro el concepto y lo que esto implica en una organización y la movilización que se puede tener en el empleado? ¿se tienen en cuenta las expectativas, sueños, proyectos de los trabajadores para enfocar el área y realmente trabajar por el bienestar del mismo? O ¿es solo un tema de moda? Para tener claro el concepto, a continuación, se realizará un pequeño bosquejo de lo que implica la felicidad en el trabajo.

A lo largo de la historia, la felicidad ha sido explicada de diferentes formas según la visión que se tenga y la disciplina desde la cual se revise, así por ejemplo, se han tenido diversas definiciones en áreas como la psicología, la filosofía o la religión, a partir de representantes como Freud, Aristóteles, Lao Tzu, Erich Fromm, entre otros. Este último en su libro El arte de amar, hace relación de la experimentación de la felicidad a partir de la vivencia del amor en sus diferentes esferas: relaciones familiares, de pareja, trabajo, amigos y demás, enfatizando en la forma como se puede hallar en diferentes contextos todo el tiempo, la tan anhelada felicidad que se ha considerado algo distante y lejano de nuestro alcance.

Partiendo de la frase inicial de este artículo la reflexión es: ¿qué tan consientes somos de lo que nos genera felicidad? y ¿qué tanto la buscamos?, ya que, por lo general, cuando se menciona, se hace como un tema que es externo a sí mismo y que es de difícil consecución, pero ¿qué tan consiente se puede llegar a ser, de cómo a partir de cada acción que se emprenda se puede lograr un nivel de felicidad y de satisfacción personal?

Actualmente, las organizaciones se preocupan por brindar desde sus diferentes programas, espacios que permitan a los empleados sentirse felices en el trabajo, pero ¿qué tanto se está teniendo en consideración el real sentir del personal para el diseño de los programas? ¿las empresas son consiente de los beneficios que se pueden obtener a partir del trabajo continuo por el bienestar de los empleados? o ¿del nivel de satisfacción o de felicidad que pueden generar cuando el proyecto de vida confluye con el de la organización? ¿qué tanta conciencia existe frente a si realmente se ama y se siente pasión por lo que se hace? Esto último como un componente importante en la felicidad en el trabajo.

Y es que hablar de felicidad no es algo utópico, es algo que tenemos a nuestro alcance, que está presente todo el tiempo, pero poco lo observamos. Solo con el hecho de ser conscientes de la misión o el sentido que tiene lo que hacemos, podemos darnos cuenta si vamos en la dirección correcta de lo que queremos o pretendemos para nuestra vida, si llena nuestra alma lo suficiente como para retarnos continuamente a aprender y así poder innovar en productos y servicios de la organización.

Para tener felicidad en el trabajo no se requiere invertir grandes cantidades de dinero, se trata de volver a lo simple que es lo que menos cuesta y llena el corazón al tiempo que motiva a ser mejor cada día, posibilitando  encontrar diferentes formas de hallar soluciones a los problemas de una manera creativa e inimaginable, valorar la importancia del reconocimiento a la buena labor, que un saludo, una sonrisa puede cambiar un mal momento, que de las buenas relaciones salen grandes proyectos que benefician tanto a la empresa como al empleado, al tiempo que ayuda al equipo en el logro de sus proyectos, es pensar en bienestar no desde lo que algunas personas consideran puede ser bueno para los empleados, sino desde la necesidad sentida y manifiesta por los trabajadores y a partir de allí, en la medida de lo posible, brindar soluciones que permitan alivianar la carga que en el momento se puede sentir, es entender al servicio de qué estoy, independiente del cargo que se desempeñe.

La invitación es entonces a hacer con-ciencia de lo que nos hace felices, agradecer en todo momento todo cuanto tenemos, porque en la medida que agradecemos, podemos visualizar cuan afortunados somos, a no esperar nada a cambio de un favor para no herirnos, ya que cuando esperamos, es cuando más daño nos hacemos, a entender que las emociones de otros no son mis emociones y no están bajo mi control, a encontrar nuestro propósito de vida y encontrar en cada acción la oportunidad de materializar el mismo, a reconocer las buenas acciones en otros.

Felicidad es dar el lugar a cada cosa, propender por las relaciones sanas, encontrar en la dificultad, no el error y un culpable, sino la oportunidad de crecimiento que necesitamos para avanzar en el camino y finalmente la invitación es a SER, para sentirse pleno y no olvidar que FELICIDAD+AMOR=SERVICIO todo ello hecho CON-CIENCIA

Y a ti ¿Qué te hace feliz en tu trabajo?…