Los factores motivacionales son claves en el desempeño de los colaboradores, cuando se encuentran puntos en común entre la empresa y el individuo parece que todo pudiera fluir de manera armónica y fácil; no obstante, existen factores externos que no dependen de la estructura de la empresa, pero tampoco pueden ser controlados por el colaborador, a estos factores les llamaré factores detonantes.
¿Te has preguntado a lo largo de tu vida laboral cuáles han sido esos detonantes que te han permitido tomar decisiones?
Entre estos pueden estar los ambientes cambiantes y desafiantes, el clima y las relaciones laborales en el trabajo, el trabajo en equipo incluso la comunicación e interacción con algunos compañeros de trabajo.
Asertivas o no, las decisiones tienen una relación directa con las emociones y estás a su vez, se conectan con acciones que son determinantes para la vida laboral, muchas veces hemos reaccionado de forma primitiva ante una situación estresante, pero la motivación intrínseca detrás de esa reacción nos da una lectura profunda de que tan motivados o no estamos con el trabajo, sea cual sea la fuente.
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En tiempos de pandemia todo se ha visto expuesto, inclusos esos malestares camuflados que conforme a la intensidad y la frecuencia de exposición se han materializado generando malestar.
No existe una fórmula mágica que permita mitigar esos detonantes que muchas veces no son del core del cargo o incluso no hay tiempo para esos asuntos, porque estamos en función de cumplir y producir. Sin embargo existe un camino que nos lleva al principio y es a esa conexión que se tiene con la marca, esa que te hace vibrar positivamente con la labor, el conocido Engagement que se activara poderosamente para combatir con esos detonantes.
Por esta razón siempre que te encuentre en una posición como esta, devuélvete al principio donde empezó todo, donde cobra vida el enamoramiento laboral, las victorias y los triunfos que serán la vitamina laboral emocional para seguir avanzando.
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